Lo que produce tu equipo, ¿te gusta, te satisface?
Muchos hemos vivido en equipos de trabajo donde nos enfocamos -mayoritariamente- en todo aquello que se pueda mejorar, esto además de que nos cansa, nos tensa y nos desmotiva. Si bien la necesidad de mejorar es una cualidad valiosa en todos los miembros, al llevarlo al extremo, puede paralizar el progreso, erosionar la confianza y generar un ambiente tóxico.
¿Pero por qué se quedan atrapados los grupos de trabajo en ese ciclo de crítica constante? acá las que me pasa por mi mente.
- Miedo al fracaso: El miedo a que algo salga mal nos lleva a querer anticiparnos a los problemas y a ser extremadamente críticos para evitarlos.
- Inseguridad: A veces, esa crítica constante es una forma de compensar nuestras propias inseguridades.
- Perfeccionismo: Esa búsqueda incesante de la perfección nos lleva a criticar cualquier desviación de los estándares que nos hemos fijado.
- Experiencias pasadas: Esas experiencias negativas del pasado, cómo hemos sido criticados tan duramente también influyen en los equipos.
Algunas consecuencias de esa crítica tan dura y tan constante:
- Disminución de la moral: La crítica constante puede hacer que los equipos se sientan desvalorizados y desmotivados.
- Miedo a cometer errores: Los equipos pueden evitar tomar riesgos o proponer nuevas ideas por miedo a ser criticados.
- Aumento del estrés: Un ambiente de trabajo altamente crítico puede generar altos niveles de estrés y ansiedad en los miembros del equipo.
- Dificultad para retener talento: Los participantes pueden buscar oportunidades en otras organizaciones donde se sientan más valorados y apoyados.
Transforma la crítica en una herramienta constructiva
Aquí te comparto algunas estrategias que si el equipo los acepta y vive como reglas, transformará ese exceso de crítica en una fuerza positiva:
- Escucha activa: Escuchar atentamente antes de ofrecer críticas, esto para comprender la perspectiva de otros miembros.
- Empatía: Ponerse en el lugar de los otros y tratar de entender sus sentimientos.
- Retroalimentación específica: En lugar de hacer críticas generales, ofrecer retroalimentación específica y constructiva y frecuente.
- Reconocimiento: Reconoce de forma grupal a todos los compañeros, permitir que se exprese agradecimiento por el trabajo en general.
- Construyan un ambiente de aprendizaje: Crear un ambiente donde los errores se vean como oportunidades de aprendizaje.
- Desarrolla habilidades de coaching: El coaching puede ayudar al equipo a desarrollar habilidades de comunicación más efectivas y brindar apoyo a los colegas.
La autocrítica es una parte importante del desarrollo personal y profesional. Sin embargo, es esencial encontrar un equilibrio entre la autocrítica y la autocompasión. Al reflexionar sobre sus propias acciones y comportamientos, los equipos pueden identificar áreas donde pueden mejorar y desarrollarse de forma más efectiva.
Una buena práctica para que los equipos -de forma hasta lúdica- puedan de a poco ir eliminando esa crítica tan negativa hacia algo más positivo, es utilizar la técnica de 5 a 1, que consiste en comprometerse a hacer al menos 5 observaciones positivas por cada negativa que se ofrezcan.
El Instituto Gottman condujo una investigación y demostró que esta relación de 5 a 1 es mágica para cualquier tipo de relación en el 1.1 o bien en equipo. Los equipos que demuestran un muy alto nivel de desempeño tienen una relación de 5:1 o de 6:1.
El liderazgo es un viaje continuo de todos los miembros del equipo. Si somos conscientes de nuestro propio estilo y si estamos dispuestos a cambiar, podemos convertirnos en equipos más efectivos.