Accountability: Responsabilidad personal para el éxito individual y colectivo
Tal vez la habilidad más crítica y fundamental para el éxito individual y más importante aún, para el éxito colectivo. Este concepto, que se traduce como “responsabilidad individual”, implica asumir las consecuencias de nuestras acciones, decisiones y comportamientos, o “de hacerse responsable” y que es esperada y hasta “castigada” en su ausencia por otros miembros del grupo.
Ejemplos de falta de accountability:
Solo para mencionar algunos comentarios que decimos y escuchamos cuando existe falta de accountability: a) falta de pasión, b) no le echa ganas, c) tenemos que presionarlo, d) no cumple con las fechas, e) no llega a tiempo, f) no asume responsabilidad por los conflictos que provoca g) normalmente no está “presente”. Ahora los más jóvenes y en el argot futbolero dicen “tiene el pecho frío”.
¿Algunos de estos ejemplos te resuenan? ¿Tienes otros ejemplos? Mencionarlos en los comentarios.
¿Por qué es importante la accountability?
- Fomenta la autoconciencia: La accountability ayuda a ser más conscientes de nuestras propias acciones y a tomar decisiones responsables.
- Mejora el rendimiento: Al asumir la responsabilidad de nuestras acciones, nos sentimos más motivados para alcanzar nuestras metas y objetivos.
- Fortalece las relaciones: La accountability genera confianza entre las personas, ya que demuestra que estamos comprometidos con nuestros acuerdos y obligaciones. Curiosamente todos nos acordamos de aquellos que sí cumplen e invariablemente de aquellos que no.
- Crea un ambiente de trabajo positivo: Un equipo donde todos practican la accountability es más eficiente, productivo y colaborativo.
¿Cómo podemos desarrollar la accountability?
- Estableciendo y acordando objetivos esperados y claros para el equipo y para cada miembro del grupo de trabajo.
- Asumiendo la responsabilidad de nuestros actos: Reconociendo tus errores y aprendiendo de ellos. No culpando a los demás por tus fracasos.
- Siendo honesto y transparente: Comunicándote de manera abierta y sincera con las personas con las que trabajas.
- Cumpliendo con tus compromisos: Haciendo lo que dices que harás, incluso cuando sea difícil. Y cuando no lo haces, avisa proactivamente.
- Siendo proactivo: Tomando la iniciativa para resolver problemas y encontrar soluciones.
- Pidiendo ayuda cuando la necesitas: No tengamos miedo de admitir que necesitamos ayuda para alcanzar los objetivos.
La accountability no se trata de ser perfecto, sino de asumir la responsabilidad de nuestras acciones y esforzarnos por mejorar continuamente. Al practicar la accountability, podemos convertirnos en líderes más efectivos, colaboradores confiables y personas más exitosas en todos los aspectos de nuestra vida.
¡Recuerda! Es un proceso continuo que requiere de esfuerzo y compromiso. Empecemos hoy mismo a practicarla y observemos cómo transforma tu vida personal y profesional.