¿Has sentido alguna vez que formar un equipo es como armar un rompecabezas, donde cada pieza es esencial para el éxito final? ¡Entonces hablamos el mismo idioma! 

Te contaré una anécdota relacionada con el onboarding de nuevos colegas en la formación de equipos. Hace unos meses, colaboré para una empresa que estaba experimentando dificultades para encontrar el equilibrio adecuado en su equipo de ventas. Durante el proceso de selección, se identificó a un candidato excepcional que parecía tener todas las cualidades necesarias para el puesto. Sin embargo, al integrarse al equipo, comenzaron a surgir tensiones y conflictos.

Investigando un poco, la empresa descubrió que el problema principal radicaba en la falta de comunicación y comprensión entre el nuevo miembro y el resto del equipo. En su momento y entre otras acciones se decidió por revisar el proceso de onboarding para garantizar que los nuevos elementos incluyeran en sus primeras semanas no solo sesiones de introducción sino algo más profundo buscando la integración con el equipo ya existente.

De inmediato se implementaron los cambios y este nuevo elemento del área de ventas tuvo la oportunidad de conocer más en profundidad los planes y programas de la empresa, presentados directamente por la personas que estaban a cargo, invirtió una cantidad razonable de tiempo para conocer uno a uno a cada elemento del equipo y se pudo observar cómo estos pequeños cambios ayudaros a  transformar la dinámica del  grupo. El nuevo miembro ha expresado su reconocimiento por los cambios adoptados ya que le permitió sentirse mejor valorado y obtuvo información importante de sus colegas por otro lado el equipo existente aprendió a apreciar las habilidades únicas que el nuevo elemento aportaba. Juntos, lograron alcanzar niveles de rendimiento que muy seguramente no hubieran sido posible de no haber implementado estos pequeños cambios. 

Esta experiencia, le enseñó al grupo que la formación de equipos va más allá de simplemente reunir personas talentosas. Se trata de cultivar relaciones sólidas, fomentando  la comunicación abierta y procurando crear un ambiente donde cada miembro pueda prosperar. Con el enfoque adecuado, cualquier equipo puede convertirse en una fuerza imparable en el mundo empresarial.

A lo largo de mi carrera empresarial, pude experimentar diferentes metodologías para dar la bienvenida y preparar a un nuevo miembro a un equipo. Algunos puntos que considero más importantes a ocurrir en los primeros días, serían: 

1. Los muy obvios, trámites iniciales que incluyen generación de correos electrónicos, entrega de equipos necesarios (laptop, teléfono, acceso a sitios corporativos, etc.)
2. Mensajes de introducción y bienvenida con la participación del gerente contratante .
3. Presentación al equipo de trabajo, dedicando el tiempo necesario para una buena introducción tanto del elemento nuevo como de los existentes. Los Roles y Responsabilidades de los otros miembros del equipo
4. Acceso y bienvenida en páginas corporativas (LinkedIn o alguna otra red social)
5. Introducción a los objetivos corporativos y departamentales y terminado con el establecimiento de objetivos individuales por parte de la Gerencia.
6. Reuniones con otros departamentos y gerencias que apliquen para una introducción más completa.
7. Presentación de los programas de Capacitación y Desarrollo con los que cuente la empresa así como el inicio de plan de desarrollo.
8. Revisiones periódicas a los 30, 60 y 90 días para asegurar que todo va avanzando como planeado. Incluyendo una reflexión acerca de que se podría hacer diferente para colegas nuevos. 

Con un proceso de Onboarding bien diseñado, los nuevos miembros se sentirán como en casa desde el primer día, acelerando su capacidad de entregar resultados para la organización lo antes posible.

En tu empresa u organización ¿Qué otros pasos consideran en el proceso de Onboarding?